lunes, mayo 27, 2013

¿Es EQUO la alternativa ciudadana para Madrid capital?

La práctica imposibilidad de que una candidatura lograra "de la nada" entrar en el Ayuntamiento de Madrid, creo que es una de las razones por las que la sociedad madrileña ha desarrollado una auténtica apatía por la política municipal. Cuando uno ve imposible cambiar las cosas lo normal es que ni se moleste en intentarlo. Alguien con ímpetu y con ideas para democratizar Madrid capital podría, ante el ninguneo de las cuatro fuerzas políticas con representación -PP, PSOE, UPyD e IU- plantearse crear un partido independiente para la capital, y adoptar como uno de sus objetivos prioritarios: democratizar las Juntas de Distrito. Es decir que los habitantes de cada barrio puedan elegir directamente a su representante en su junta de distrito. Por poner un ejemplo, mi distrito, Carabanchel, cuenta con una población que supera ligeramente el cuarto de millón. Estamos hablando pues, de un distrito que tiene más habitantes que cualquier otra localidad madrileña.

Pero como digo, es imposible. Pretender crear, sin apoyo previo, un partido independiente para Madrid capital al estilo Vecinos por Torrelodones o Unión por Leganés, es una quimera. Madrid es una ciudad de más de 3 millones de habitantes en la que es imposible participar en política, a menos que pases por el aro de aceptar la base ideológica que proponen cada uno de los cuatro partidos; y te dejes engañar por la idea de que "el aparato" permite opinar a sus bases ¡ja!

Soy de los que piensa que la política municipal debería ser el primer paso para empezar a reivindicar derechos desde las instituciones "desde abajo". Y una vez que las nuevas organizaciones hayan dado ese paso, lo siguiente sería hacer saltar ese movimiento social a parlamentos territoriales, nacionales y supranacionales. De abajo a arriba. Así, creo que esa imposibilidad de participar en la política municipal de Madrid hizo que hubiera mucha gente dispersa que sabía que un cambio era necesario, pero que necesitó del 15M para "sentir que no estaba sólo". Sin embargo, claro está que el 15M madrileño no se centra en el municipalismo, sino que fue una explosión de ideas generales que tocan todos los ámbitos reivindicativos de la sociedad.

Y por otro lado, al margen de la fuerza de este movimiento social, viene cobrando bastante notoriedad la iniciativa de EQUO. Todas las encuestas vaticinan que de haber una nueva fuerza política que obtenga representación en la Comunidad y en el Ayuntamiento de Madrid: esa sería EQUO. Quizá me hubiera gustado más que la alternativa ciudadana en Madrid capital hubiera sido "independiente" y que no llevara ese sesgo previo del "ecologismo de izquierda moderada". Pero creo que debemos tener altura de miras y, que cada cual lo llame como quiera: "partido independiente contra el bipartidismo", "izquierda moderada eclogista", o "tercera vía ciudadana", que a mí me parece que ese espacio que queda entre UPyD e IU, y que el PSOE no es capaz de cubrir; ese espacio que ocupa Unión por Leganés en tal localidad, es el mismo espacio que habrá de cubrir EQUO en la capital en un futuro.

Y en base a eso, creo que sería muy interesante que los partidos independientes integrados en CAPI y EQUO hicieran acercamientos para conformar alternativas ciudadanas para presentarse juntos en citas electorales como las siguientes elecciones autonómicas en la Comunidad de Madrid, o incluso a las elecciones para el Parlamento Europeo del año que viene. Así, animo a los actores de uno y otro lado a que profundicen las conversaciones para intentar llevar a cabo esa coalición.

viernes, mayo 24, 2013

El derecho a la vivienda en la Constitución Española y en la Ecuatoriana


Al hilo de la propuesta de Anmistía Internacional de garantizar constitucionalmente el derecho a la vivienda, he querido comparar cómo está recogido este derecho en la Constitución Española con alguna otra que estuviera vigente. Empecemos recordando la "declaración de intenciones" de la nuestra:

Artículo 47.- Todos los españoles tienen derecho a disfrutar de una vivienda digna y adecuada. Los poderes públicos promoverán las condiciones necesarias y establecerán las normas pertinentes para hacer efectivo este derecho, regulando la utilización del suelo de acuerdo con el interés general para impedir la especulación. La comunidad participará en las plusvalías que genere la acción urbanística de los entes públicos.

En la práctica se ha demostrado que es insuficiente, visto que tras el estallido de la burbuja inmobiliaria el derecho de las entidades bancarias parece estar por encima de un derecho fundamental de los seres humanos como es el derecho a una vivienda digna. Sin entrar a valorar la eficacia de otras cartas magnas en este sentido, sí que querría comparar el anterior texto con otro más ambicioso y explícito. Veamos lo que dice la Constitución del Ecuador, de 2008, en su sección cuarta, titulada "Hábitat y vivienda":

Art. 375.- El Estado, en todos sus niveles de gobierno, garantizará el derecho al hábitat y a la vivienda digna, para lo cual: 
1. Generará la información necesaria para el diseño de estrategias y programas que comprendan 
las relaciones entre vivienda, servicios, espacio y transporte públicos, equipamiento y gestión del 
suelo urbano. 
2. Mantendrá un catastro nacional integrado georreferenciado, de hábitat y vivienda. 
3. Elaborará, implementará y evaluará políticas, planes y programas de hábitat y de acceso 
universal a la vivienda, a partir de los principios de universalidad, equidad e interculturalidad, 
con enfoque en la gestión de riesgos. 
4. Mejorará la vivienda precaria, dotará de albergues, espacios públicos y áreas verdes, y 
promoverá el alquiler en régimen especial. 
5. Desarrollará planes y programas de financiamiento para vivienda de interés social, a través de 
la banca pública y de las instituciones de finanzas populares, con énfasis para las personas de 
escasos recursos económicos y las mujeres jefas de hogar. 
6. Garantizará la dotación ininterrumpida de los servicios públicos de agua potable y electricidad 
a las escuelas y hospitales públicos. 
7. Asegurará que toda persona tenga derecho a suscribir contratos de arrendamiento a un precio 
justo y sin abusos. 
8. Garantizará y protegerá el acceso público a las playas de mar y riberas de ríos, lagos y 
lagunas, y la existencia de vías perpendiculares de acceso. El Estado ejercerá la rectoría para la 
planificación, regulación, control, financiamiento y elaboración de políticas de hábitat y 
vivienda.

Art. 376.- Para hacer efectivo el derecho a la vivienda, al hábitat y a la conservación del 
ambiente, las municipalidades podrán expropiar, reservar y controlar áreas para el desarrollo 
futuro, de acuerdo con la ley. Se prohíbe la obtención de beneficios a partir de prácticas 
especulativas sobre el uso del suelo, en particular por el cambio de uso, de rústico a urbano o de público a privado.

martes, mayo 21, 2013

Los nuevos socialistas están en la "inopia 3.0"

La profunda crisis interna del PSOE, y la imparable escalada en las encuestas de UPyD y de IU vaticinan un irremediable descalabro de los socialistas. En el PSOE llevan camino de quedar relegados a algunos parlamentos autonómicos y ayuntamientos. Sinceramente, tienen tantas sillas que calentar, tienen tantos enchufados, que no va a ser nada fácil que se inmolen. Sobre todo porque viven en su mundo, esas nubes que a día de hoy Zapatero estará supervisando… hacen piña y sólo tratan buscan recambio dentro de sus filas, utilizando la caduca dialéctica de siempre: “socialismo”, “izquierda”, etcétera. Demasiados egos, demasiados intereses personales, para que se bajen del globo y liberen al PSOE de ese peso muerto que les impide retomar el vuelo en plena crisis neoliberal. Cuando se den cuenta, será probablemente demasiado tarde.

Con la sangría del paro, vaticino que dentro de muy poco tiempo, Izquierda Unida adelantará al PSOE en las encuestas, y eso será la puntilla. El crecimiento de Izquierda Unida está siendo sostenido y están sabiendo liderar razonablemente bien la representación de “la izquierda”. Aunque dentro del partido siempre surjan disidentes a los que les gustaría que fuese un partido “anticapitalista”, lo cierto es que ya hay voces, como la de Gaspar Llamazares, que hace llamamientos a “representar un frente amplio de izquierdas”. Y bien, esa búsqueda implícita del “centro-izquierda”, acompañada de una crisis económica que no parece que vaya a resolverse a corto plazo, me hacen augurar que más pronto que tarde Izquierda Unida se convertirá en la segunda fuerza política.

Además, en el escenario subsiguiente a la materialización de los resultados de las próximas elecciones, se producirá necesariamente un nuevo balance bipartidista de fuerzas. Posiblemente ninguna de las dos fuerzas vaya mucho más lejos de los cien escaños (si es que los consiguen), pero no me cabe duda de que una de ellas será Izquierda Unida. La otra, pues habrá que verlo. Habrá que ver si el PP logra salvar los muebles, mira que me extraña, pero el caso es que parece que UPyD ya ha empezado a darse cuenta de que el PSOE morirá de hemorragia interna y que el partido al que ha venido a sustituir es al PP. Tanto es así, que ya vemos cómo quieren ganarse las simpatías de los votantes más acérrimos al PP, siendo ambiguos con el tema de “la condena del franquismo”, por ejemplo.
Así, si bien vaticino que la lucha por el centro-izquierda ya la está ganando IU desde la izquierda; en la lucha por el centro-derecha creo que aún no está nada claro si finalmente el PP resistirá, o si UPyD la acabará conquistando desde “su ambigüedad”. Está por ver, y en dos años parece que tienen margen para conseguirlo, aunque no me extrañaría nada que el PP adelantase las elecciones lo suficiente para evitarlo.


Pero volvamos a lo único que me parece claro: “que cuando el PSOE quiera hacerse el harakiri será ya demasiado tarde”. Que cuando las corrientes internas se recompongan, reconsiderarán dejar el PSOE y meterse en Izquierda Unida, o en otros movimientos en auge de corte más transversal como Ciutadans en Cataluña o partidos independientes locales y regionales en el resto de España. Con este nuevo escenario, parece lógico que la CAPI (Confederación de Agrupaciones Políticas Independientes) acabe seduciendo a muchos socialistas que no encuentren su hueco en la “izquierda clásica” y quieran formar parte de este nuevo movimiento ciudadano, con espíritu de construir algo de abajo a arriba y contando con el ciudadano de a pie.

Esos socialistas serán los que hayan sido capaces de darse cuenta de la razón por la que dejaron de ser creíbles no fue que sus nuevas propuestas sean malas. De hecho tengo que decir que las propuestas que hace nuevo socialismo 3.0 en general me gustan, pero claro, viniendo de donde vienen ¡no hay quién se las crea! Salvo las partes en las que pretenden dar lecciones de democracia interna o proponen para la democracia española cosas que los socialistas jamás hicieron, el resto son propuestas bastante útiles, que pueden aplicarse a retos futuros. Pero es que da igual. Pesa demasiado la mala reputación que arrastra el PSOE, su crisis interna y su dialéctica caduca de llamar “socialismo” a algo que no deja de ser “bien común” o “intereses de la gran mayoría”. Tantos años de “falso socialismo” han hecho que la palabra “socialismo” no valga NADA.

Detrás de esas propuestas veo sensatez y talento. Pero si esos militantes no se adaptan a los nuevos tiempos, ese trabajo será desperdiciado. En ese sentido, me congratula ver cómo socialistas de base se van incorporando con normalidad a los movimientos sociales como si fueran “uno más”; de la misma manera que celebro que Beatriz Talegón, por ejemplo, se esfuerce en reconciliarse con los movimientos sociales haciéndose eco del escándalo que provocó la escisión Democracia Real Ya. Ojalá estas caras nuevas sepan centrar su actividad política en dar recorrido a las propuestas y saber explicarlas, no esforzándose tanto en partirse la cara por el partido, y sabiendo dejar el barco socialista abandonado a su suerte. En ese sentido, Rubalcaba es un buen capitán: en el hundimiento en el que él mismo está participando parece que quiere quedarse hasta el final.

martes, mayo 07, 2013

Hay quién dice que detrás del PSOE podría estar la derecha

¿A que mola mi título sensacionalista? Supongo que el votante tradicional de Izquierda Unida me comprará la idea, pero no van por ahí los tiros. Si bien es verdad que IU son los que mejor están diagnosticando los problemas de la crisis, no me siento para nada identificado en su dialéctica marxista. Yo apuesto por la socialdemocracia, y me da igual que ésta se vista de liberal-progresismo, transversalismo, regionalismo moderado, ecologismo o movimiento ciudadano. La socialdemocracia no se vende, se DEMUESTRA. Y, ciertamente, el germen del movimiento indignado español reside en una indignación con la socialdemocracia.

La socialdemocracia es la que tenía que habernos dado las soluciones a la crisis del capital, en lugar de crearnos más problemas. Sin embargo, el PSOE fue incapaz de demostrarle a los españoles que "había vida después de Zapatero". Un socialdemócrata con cojones hubiera defenestrado al propio Zapatero desde dentro del PSOE. La única que lo hizo fue Rosa Díez, que como no lo consiguió se fue. Aunque, recordemos que sus motivos estaban más relacionados con el modelo de España que en discrepancias sobre la socialdemocracia. Aunque UPyD tampoco me representa, ¡basta ya! de hacer demagogia con el terrorismo y de ponerse a los movimientos sociales en contra, ¿por qué no centran sus propuestas en salir de la crisis?

Bueno, a lo que iba, ójala en 2009, segundo año de crisis, hubiera salido algún verso suelto con cierto poder en el PSOE, para haber refundado el PSOE en condiciones: señalando a los enchufados que viven del Estado sin dar palo al agua, señalando a los socialistas que formaban parte de los consejos de administración de las cajas de ahorros, señalando al mismísimo Felipe González por cobrar otro sueldo además de su paga vitalicia, señalando a Zapatero por inepto, pidiendo su dimisión como presidente del Gobierno y devolviendo al PSOE, en dos años, la credibilidad perdida como partido socialdemócrata.

Pero eso no ocurrió. Y en su lugar... en su lugar no ocurrió nada. España estaba dormida, veíamos cómo en Europa habia manifestaciones por doquier, y en España, nada. Hasta que un día, de repente, una maniestación no demasiado numerosa tuvo una increíble reprecusión mediática: la convocada por Democracia Real Ya! el 15 de mayo de 2011. Recordemos, por cierto, que el éxito de AcampadaSol, una fiesta de activismo social y democracia que duró cuatro semanas, sólo fue posible gracias a la fe de miles de jóvenes -y no tan jóvenes- con ganas de cambiar las cosas, pero también gracias a que, por la razón que fuera, a Rubalcaba -entonces Ministro del Interior- le convenía políticamente no desalojar aquello a porrazos.

Pero es que Rubalcaba, no era el verso suelto que estábamos anhelando, sino una momia política presente en los declives de los gobiernos de Felipe González y José Luis Rodriguez Zapatero. Por tanto, lamentándolo mucho, una gran mayoría de activistas 15M le dimos la espalda al PSOE. Pero la culpa de eso, es única y exclusivamente del PSOE. El 15M, unas veces con más acierto que en otras, se trata de la revolución más sensata que ha vivido Europa en lo últimos tiempos: es pacífica, y nunca quiso ser lo que no es. En ese sentido, las declaraciones de Beatriz Talegón, en las que señaló que "había quién decía que detrás del 15M podría estar la derecha" fueron tremendamente desafortunadas. Tanto es así, que, consciente de ello, no tardó mucho en aclarar que lo que estaba era denunciando las maniobras de neofalangistas infiltrados que se habían apropiado de la Asociación Democracia Real Ya, a costa de la Plataforma homónima.

Estoy deseandito que el 15M articule por fin una alternativa política, pero también, porqué no, a ver si en el PSOE da por fin alguien un golpe encima de la mesa, y echa todos los oligarcas que no hacen más que favorecer a las grandes empresas en detrimento de las pequeñas. Los que aún mandan en el PSOE, temerosos de perder sus privilegios, ofrecen pactos a la derecha tradicional -lo cual, encima, parece que tiene el beneplácito del Rey- en lugar de ofrecer pactos a los partidos que están llamados a regenerar la democracia: IU, UPyD, EQUO y CAPI, "Confederación de Agrupaciones Políticas Independientes"

¿Y qué pacto le ofrecen al PP, por cierto? Rubalcaba propone destinar 20.000 millones de euros para que el crédito fluya a las PYMES. Exactamente lo mismo que propuso Holande para Francia. ¿Pero qué ha pasado en Francia? Pues que buena parte de esos los millones que había prometido en concepto de "créditos para la competitividad" para PYMES, han acabado destinados en las grandes empresas y no tanto en las pequeñas y medianas. Promesas incumplidas por doquier. ¿Podemos acaso esperar que en España sería mejor que en Francia? ¿En la España de las puertas giratorias de PPSOE, con excargos colocados en la empresa privada y demás? Mientras sigan PPSOE en el gobierno, me aventuro a decir que en España sería peor. Y acuso al PSOE a dejarse manejar por la clase de los grandes empresarios. ¿Está la derecha detrás del PSOE?

viernes, mayo 03, 2013

El PSOE debe inmolarse para volver a ser creíble

La sociedad española está harta de los dos grandes partidos. Tras tantos años de promesas incumplidas, corrupción y clientelismo, la credibilidad de toda voz proveniente del PP o del PSOE queda en entre dicho. Y es que después de tanto tiempo gobernando ya de nada sirve prometer, muy necio hay que ser para que a una persona le quepa la esperanza de que estos partidos cumplirán lo que prometen, cuando, tras muchos años en el poder, años en los que pudo ejecutar las promesas, en muchas ocasiones hicieron justo lo contrario de lo que prometieron.

Durante muchos años, el estilo político de estos dos partidos ha sido beneficioso para la normalización democrática de la sociedad española. Claro está que tras el franquismo, el hecho de que el centro-izquierda y el centro-derecha se hayan alternado en el poder fue durante mucho tiempo bueno, para la constatación de que había alternativa. Siendo justos con la historia los que mejor materializaron esa alternancia fueron Felipe González y José María Aznar. Conviene no olvidar que ambos se fueron por la puerta de atrás, el primero golpeado por la corrupción y desgastado tras catorce años de gobierno, y el segundo tras aliarse con el presidente Bush con todas las consecuencias, incluída la de meternos en una guerra en la que no pintábamos nada. Y que después de aquello llegaron de rebote Zapatero y Rajoy, dos políticos a los que el puesto de presidente les ha venido a quedar no grande, sino grandísimo.

Desde hace aproximadamente quince años, una vez superada la pequeña crisis económica de los años noventa, PP y PSOE en una ausencia absoluta de ideas se han limitado a luchar por conservar sus privilegios, me atrevería a decir que en algunos casos de buena fe, creyéndose ellos mismos que la política española sería peor sin ellos. Normal. ¿Qué se puede esperar de la generación de políticos, de dentro de estos partidos, que ronda los 50 ó 60 años? Ellos tienen grabado a fuego que el bipartidismo fue un éxito contra el franquismo, aquella fue su motivación política; ellos, por tanto no pueden aportar demasiado para los nuevos retos de la demoracia. Lo mejor que pueden hacer es irse.

Así, la única esperanza de estos partidos es el relevo generacional. La gente joven que ronda los 25 ó 35 años, cuya motivación política sea la crisis económica actual y la política que está por venir. Sin embargo el reto más importante de toda esa gente, de entre la que quiero destacar el nombre de Beatriz Talegón, no está tanto en proponer cosas hacia afuera, sino en conseguir una revolución de puertas para adentro, cargándose todas las redes clientelares y de nepotismo tejidas durante tantos y tantos años. Estos políticos de savia nueva, no tienen nada que perder en ese sentido. Nacen sin demasiados apoyos internos y tienen el punto fuerte de que son mediáticos. Tienen ante sí la gran oportunidad de dejar con el culo al aire en público al aparato del partido, y tienen la oportunidad de tender la mano a esos partidos que entienden la socialdemocracia de manera diferente, como puede ser UPyD, Ciutadans, IU o los partidos independientes locales. Es decir, reconocer que esos otros partidos tienen hoy en día más legitimidad para proponer que el partido socialista y sentarse con ellos a hablar de propuestas.

Como digo, creo que Beatriz Talegón abrió el camino con su famosa intervención en la que criticaba al "socialismo de cinco estrellas". Abrió un camino, yo pienso, desde la honestidad de alguien que cree que la revolución interna del PSOE es posible. Sin embargo, yo sólo creo lo que veo, y considero que a Talegón, y a todos los que quieran seguirla, les queda un camino largo, una travesía en el desierto en cuyo transcurso tienen mucha tela que cortar. Años en los que no toca seguir haciendo discursos grandilocuentes, lo que toca es predicar con el ejemplo. Para que el PSOE vuelva a ser creíble, debe inmolarse: todos los que colaboraron en los consejos de administración de las cajas de ahorros, deben ir FUERA. Todos los que participaron en el Gobierno de Zapatero, empezando por la momia política de Rubalcaba, deben ser DEFENESTRADOS sin complejos por estos nuevos líderes. Todos los que hacen el ridículo proponiendo primarias para todos cuando ni el propio PSOE las practica, no hacen sino perjudicar la credibilidad de propio partido, Fuera también.

Estos nuevos líderes deben señalar sin complejos a toda esa vieja guardia, abriendo una batalla a la vista de todos que sólo puede acabar de dos maneras posibles: haciendo del PSOE un partido creíble o destruyéndolo del todo para dar paso en las elecciones a otras opciones socialdemócratas nuevas. Ambas cosas son buenas para la sociedad, y la responsabilidad de abrir más aún tal caja de los truenos, recae en los jóvenes de esos partidos. No hay tiempo que perder.